martes, 26 de julio de 2011

Estructuras de elementos recíprocos - marcos recíprocos


























Con un grupo de estudiantes de arquitectura de la Universidad San Francisco de Quito construyendo estructuras de elementos recíprocos con cuartones de pino reciclado de 2 metros de longitud.

Estructuras recíprocas, marcos recíprocos, en inglés reciprocal frame structures. Lo correcto sería llamarlas estructuras de elementos recíprocos porque se trata de elementos que se apoyan mutuamente en un circuito cerrado.
Al final construimos una estructura con dos arcos que cubrían cerca de 30 m2 y que costó tan solo 200 dólares incluído el barniz de alta montaña que se aplicó al final. Lamentablemente no tengo fotografías de la estructura terminada pero todavía se encuentra en la plazoleta frente al Colegio de Arquitectura de la USFQ.

domingo, 17 de julio de 2011

Fernado Távora

Cada cierto tiempo me gusta releer este texto de Fernando Távora publicado en el número 14 de la Revista DPA de Barcelona. Cuando la desilusión y el despecho por la profesión me abruman, las ideas de Távora resuenan con el espíritu de un oficio lleno de sentido.

"Durante años pensé en la Arquitectura como algo diferente, especial, sublime y extraterreno, algo así como una intocable virgen blanca, tan ideal que a pocos era dado realizarla o comprenderla; el arquitecto era para mi un genio semidivino o apenas nada. Entre la pequeña choza y la más famosa obra de Arquitectura no había relación, como no la había entre el albañil y el arquitecto. Eran cosas diferentes, desligadas. Este concepto mítico de la Arquitectura y del arquitecto producía en mi un atroz sufrimiento, dado que yo no era un genio y no conseguía por tanto realizar edificios tan intocables como vírgenes blancas.

Pasaron los años. Vi edificios y conocí arquitectos. Percibí que un edificios no se contiene en una bella planta ni en una bella fotografía hecha en un día de sol y bajo su mejor ángulo; verifiqué que, al final, todos los arquitectos eran hombres, con sus cualidades, mayores o menores, con sus defectos, mayores o menores. Advertí entonces que la Arquitectura era sobretodo un acontecimiento como tantos otros que llenan la vida de los hombres y, como todos ellos, sujeto a las contingencias que la misma vida implica. Y la intocable virgen blanca se convirtió en mi en una manifestación de vida. Perdido su sentido abstracto, encontré entonces la Arquitectura como una cosa que yo o cualquier otro hombre podíamos realizar – mejor o peor – terriblemente contingente, tan asida a la circunstancia como un árbol se coge a la tierra por sus raíces.

Y el mito se deshizo. Y entre la pequeña choza y la obra maestra vi que existían relaciones, como sé que existen entre el albañil (o cualquier otro hombre) y el arquitecto de genio.

Vista bajo este ángulo, la Arquitectura se me aparece ahora como una gran fuerza, fuerza nacida de la Tierra y del hombre, cogida por mil hilos a los cambios de la realidad, fuerza capaz de contribuir poderosamente a la felicidad del medio que la vio nacer."


Fernando Távora


DPA 14

domingo, 6 de febrero de 2011

El hogar primitivo - nido singular de la especie humana


“La construcción de todo edificio comunitario o vivienda constituye siempre, hasta cierto punto, una anamnesis, la evocación de un ser divino creador del centro del universo. Por ese motivo, el lugar no puede elegirse al azar ni responder tampoco a motivos racionales: su descubrimiento debe responder a la revelación de alguna divinidad” (Rykwert, 1988).


El Inicio

Un prado verde, algunos árboles, un estanque y el sol


 

Una rama ha caído al suelo,
un asiento bajo la sombra de los árboles.
un lugar que se manifiesta con intensidad



Ahora un punto ocupa el centro de ese lugar.
Se ha trazado un círculo, primero con cal y luego con piedras



Las piedras se afirman con barro del estanque cercano.
La familia participa.



El Hogar. Un sencillo tafetán tejido con hierro.





El sol es el centro - Fuente de luz y de calor en nuestro mundo



La hoguera es el centro,



Origen del conocimiento y del bienestar en los hombres





“Antes de pensar en erigir tiendas, empalizadas o chozas, los hombres se congregaban alrededor del fuego: la hoguera que los mantenía secos y calientes, en la que podían preparar sus sencillos alimentos. El hogar es el germen, el embrión de todas las instituciones sociales. La primera señal de asentamiento, de reunión, de descanso, tras los largos nomadeos y trabajos de la caza, es siempre la hoguera, el brillo de las llamas crepitantes.” (Semper, 1849).

EL NIDO DE LA ESPECIE HUMANA
Un espacio de planta central organizado alrededor del fuego fue, durante varias decenas de miles de años, la morada distintiva de los seres humanos y un artefacto fundamental para su evolución y supervivencia. Este tipo de vivienda primitiva, tan antigua como el hombre, es el nido singular de la especie humana.



"Tuyo este hogar hondo
que reclama el leño
para alzarte en humo,
para amarte en fuego."
Del poema Entremos de José Pedroni

sábado, 29 de enero de 2011

Pavimentos de ladrillo


Un espacio de planta central con el hogar abierto fue, en los albores del tiempo, el nido singular de la especie humana
"Todas las casas rurales del mundo entero han tenido el mismo hogar abierto que hoy conserva la casa japonesa; en todas partes, el humo salía sencillamente por el tejado, sin chimenea; encima del fuego colgaba o reposaba la marmita para el agua, junto al fuego se calentaban todos y secaban la ropa mojada: el fuego era el centro de la familia y de la casa (...) cuando una vez nos invitaron unos amigos a pasar el Año Nuevo en una casa rural situada en la montaña, junto a Kioto, al sentarnos alrededor del fuego crepitante con la familia, encabezada por el abuelo y la abuela, que también vivían del cultivo del campo y la huerta, así como de la caza, el ambiente era tan acogedor que ningún habitante de la ciudad sería capaz de sustraerse a él. La habitación se llena de humo y hay que adquirir cierta práctica para sentarse bien y que no se le llenen a uno los ojos de lágrimas. Pero la sala de la casa rural no tiene techo; el humo sube hasta el tejado y oscurece la madera; esta cuando se limpia, adopta por abajo, hasta donde alcanza la mano, un tono pardo rojizo más bonito que el que pudiera conseguirse con cualquier otro medio artificial. Arriba, las grandes, pesadas y, a menudo también, arqueadas vigas desbastadas sólo con el hacha, se vuelven con el humo de un color negro mate (...) La nubecilla de humo azul forma parte de la imagen del tejado y de la casa; ese humo convierte la casa en una criatura viva (...) El hogar abierto está siempre hundido en el suelo cubierto de tatami, junto al escalón que da a la sala, allí dónde uno puede sentarse en el peldaño sin quitarse las sandalias. El gran pie derecho - he llegado a encontrar uno de un grosor de 50 centímetros- se halla en las proximidades, o bien junto al canto del escalón, o bien exento, en el suelo del pavimento, por encima del cual se cruzan en lo alto las vigas más pesadas. El peso y el grosor de estas vigas significa orgullo y riqueza. " Bruno Taut

Enladrillado a manera de sarga

miércoles, 4 de agosto de 2010

Quinta semana de cubierta. Estructura de marcos recíprocos


Reciprocal frame o estructura de marcos recíprocos
Hoy día los maestros hicieron un tejido con vigas de 28 x 6 cm.

Aplausos











El centro del Hogar Primitivo, como parte integrante de un radio solar y de un radio terrestre, en el momento de los equinoccios


El centro del Hogar como parte integrante de un radio terrestre, el momento y el día en que la luz del sol (un radio de circunferencia de la estrella más cercana) se alinea con el centro de la tierra: el equinoccio del 21 de marzo de 2017 en el Ecuador

jueves, 25 de marzo de 2010

MARZO

"Busco con verdadero afán esas casas que son "casas de hombres" y no casas de arquitectos. El asunto es grave. Puede decirse que una casa de hombre es amor. Dejadme precisar por esto lo que respecta al cine: Observad un día, no en uno de esos restaurantes de lujo, en los cuales la intervención arbitraria de los camareros y de los "sommeliers" destruye mi poema, observad en una pequeña taberna popular, dos o tres comensales que han acabado de tomar su café y están charlando. La mesa todavía está llena de vasos, botellas, platos, la aceitera, la sal, la pimienta, la servilleta y el servilletero, etc. Ved el orden fatal que pone todos esos objetos en relación los unos con los otros; todos han servido; han sido cogidos con la mano de uno o de otro de los comensales, las distancias que los separan son la medida de la vida. Es una composición matemáticamente arreglada; no hay ningún falso lugar, ningún hiatus, ni un engaño. Si un cineasta, no alucinado por Hollywood se encontrase ahí filmando esta naturaleza muerta en “primer plano”, tendríamos un testimonio de pura armonía. ¿Es posible? Sí, y desgraciados aquellos que buscan falsas armonías, trucadas, comerciales, armonías académicas, de Vignola, de 1925 o de último barco."

LE CORBUSIER: “Prólogo Americano”, Precisiones respecto a un estado actual de la arquitectura y del urbanismo, 10 diciembre 1929 a bordo del "Lutétia", mar adentro de Bahía. Brasil, Oceano Atlántico.